Reloj de sol, osario fecundado, vientre que pare el tiempo no llegado, esqueleto del tiempo fallecido: lección de eternidad me has enseñado al entregarme el sol petrificado y el tiempo en peña dura convertido.
Calladamente la vida, calladamente, se va... Calladamente cumplida pronto mi hora llegará. Calladamente la espero desde que te vi partir. Calladamente te quiero... Así me voy a morir.