
Soñar y dejar de soñar
Dicen que los sueños están hechos con la materia de la vida.
Quizá lo más seguro es que la vida esté hecha con la materia de los sueños.
Cuando hablo de lo que he soñado, ¿estoy hablando de lo que he vivido? No. Cuando hablo de lo que he vivido estoy hablando de lo que he soñado.
En el sueño no decimos: “Estoy viviendo“.
En la vida deberíamos decir: “Estoy soñando“.
La muerte no será muerte si después de morir volvemos a soñar.
La muerte ha de consistir en la presencia del sueño y en la ausencia de los sueños.
Morir es dormir sin soñar.
Vivir es dormir soñando.
La vida no es sueño: es sueños.
La muerte será sueño sin sueños.
Compartir:
- Haz clic para imprimir (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Facebook (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Twitter (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Tumblr (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en WhatsApp (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Pinterest (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Reddit (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para enviar por correo electrónico a un amigo (Se abre en una ventana nueva)
- Más


Entradas Relacionadas

Masacres, epidemias y Estado
septiembre 22, 2020
Silenciosamente y muy rápido
agosto 30, 2020