Que el nuevo año me encuentre con un amigo más y con una envidia menos.
Que me regale el don de la esperanza y me quite las sombras de la desesperación.
Que me haga ver la promesa que hay en cada nuevo día, y me abra los ojos a la belleza de las cosas y los seres.
Que me enseñe a murmurar un poco menos, y a amar un poco más.
Que me haga ver que «yo» es una sola persona, y que «vos», «él», «nosotros» y «ellos» son muchas personas.
Que me haga apartarme de la rutina y me lleve a caminar por senderos que no conozco aún.
Que recuerde yo a quien me olvidó; que perdone a quien me ofendió, y que ofrezca la mano abierta a quien me hirió.
Que el Año Nuevo sea realmente un nuevo año.